Una pájara en los 5 últimos minutos de partido condenan un extraordinario partido fuera de casa donde descató Roberto hasta que llegaron los goles con efectos de vista típicos del más despistado N'Kono y donde Darder, Alex López y unos activos Piatti y Hernan dieron dinamismo a un Espanyol donde domino toda la primera parte de cabo a hasta casi rabo, porque faltando 4 minutos Roberto hizó una gran parada. En la segunda parte siguió la pájara donde Roberto salvo al equipo nuevamente en uno contra uno con Bacca, y luego llegó el gol en un pase al espacio en un centro que marcó Alex López.
La pájara esta vez tiene un nombre propio y es Adrià Pedrosa, donde no cubrió bien en el primer gol y no estaba en su sitio en la internada que propuso el segundo gol. Este chico debería estar más en punta como extremo, por desborda, encara y tiene pegada, pero le cuesta horrores volver a su puesto atrás. Más que sustituo de Didac lo es de Piatti, que en el segundo gol no llegó a cubrir bien al que centraba para que luego en el centro David Lopez no pudiera llegar a cubrir a Bacca.
Todo queda abierto para la vuelta porque a pesar de que este Villarreal es un equipo desequilibrado, tiene mucha pegada arriba.
